H enciclopedia 
es administrada por
Sandra López Desivo

© 1999 - 2012
Amir Hamed
ISSN 1688-1672

 



DAVID CRONENBERG - VIDEODROME - MASS MEDIA - MCLUHAN, MARSHALL - EL MEDIO ES EL MASAJE - LA COMPRENSIÓN DE LOS MEDIOS - EXISTENZ - SHIVERS - RABID - CRASH - TELEVISIÓN - MEDIOS CALIENTES/FRÍOS - VIDEO-IMAGEN - SUICIDIO - SOFTCORE - SNUFF MOVIES - REPRESENTACIÓN -

Las extensiones de los medios en el filme "Videodrome de David Cronenberg (I)

Leonardo Díaz Bouquillard
En Videodrome la imagen-video producida en serie es la forma dominante de los medios, la que se encierra totalmente en la estructura de la sociedad. La pantalla de televisión funciona como el medio primario de la experiencia, y consecuentemente, como la distinción entre la realidad y la representación


"Te gusta William Burroughs, sale por la televisión, lo grabas y lo tendrás en casa cuando quieras, siempre. Así pues, sin duda forma parte de tu sistema nervioso, está a tu alcance, puedes tocarlo"
David Cronenberg


La función de los medios de comunicación en la sociedad es un tema que ha sido investigado por diversas escuelas teóricas, desde la mass comunication research hasta los intentos más formalistas de la Escuela de Frankfurt; sin embargo, entre aquellas dos escuelas existen las "exploraciones" del teórico canadiense Marshall McLuhan, quien propone en sus famosos textos El medio es el masaje (1967) y La comprensión de los medios (1964) las profundas modificaciones que los medios han provocado en la humanidad. Me parece relevante identificar las teorías de McLuhan con la obra del cineasta, también de origen canadiense, David Cronenberg. Tanto McLuhan como Cronenberg se centran en la relación entre los medios electrónicos y la condición humana, y sus tremendos efectos de esta relación en la esfera psíquica y social.

En el presente ensayo discutiré las implicaciones de la comprensión teórica que hace McLuhan de los medios, según sus preceptos en El medio es el masaje, comparando estas teorías con la excelente caracterización de una sociedad mediatizada por la televisión, en el filme de Cronenberg, Videodrome (1982). Para McLuhan "las sociedades siempre han sido moldeadas más por la índole de los medios con que se comunican los hombres, que por el contenido mismo de la comunicación", para Cronenberg, los medios de comunicación (entre ellos la televisión) son instrumentos no necesariamente negativos (la crítica pueril de sus filmes puede hacer parecer lo contrario), "intento demostrar en una y otra película que hay que estar muy atentos para que las cosas exteriores no modifiquen nuestras vidas hacia algo peor", señaló alguna vez en una entrevista.

El
medio es el mensaje

La proclamación de McLuhan es certera: una correcta comprensión de los medios es de importancia extrema en la era electrónica. Esta visión es compartida en la filmografía de Cronenberg, quien propone en sus filmes una visión determinista y algunas veces "nefasta": los medios condicionan, forman la opinión humana y la experiencia (a veces hacia un nuevo estado mental y físico), como en Videodrone o Existenz (1999), una de sus ultimas fantasías erótico- tecnológicas. Para McLuhan el advenimiento de los medios electrónicos ha aumentado el alcance de éstos en la esfera social, y precisamente esas nociones son el foco central en la investigación (exploración) del profesor canadiense. En El medio es el masaje McLuhan introdujo radicalmente una nueva perspectiva en el estudio de los medios, que se concentran en la experiencia del mundo mediado: la radicalidad de su teoría se entiende en el concepto "el medio es el mensaje".

Para McLuhan, las consecuencias psíquicas y sociales que los
medios introducen en asuntos humanos constituyen su mensaje primario. De esta manera McLuhan se concentra en las cualidades formales de los medios, más que en el contenido, para evaluarlos en la forma que funcionan en la sociedad. McLuhan señala "los medios, al modificar el ambiente, suscitan en nosotros percepciones sensoriales de proporciones únicas. La prolongación de cualquier sentido modifica nuestra manera de pensar y de actuar, nuestra manera de percibir el mundo. Cuando esas proporciones cambian, los hombres cambian".(1)

Con estas
palabras McLuhan nos dice que los medios son una extensión de nuestros sentidos, y de tal modo una forma de organizar los patrones de la opinión sensorial. Los medios son, por lo tanto, "las extensiones del hombre", pues la función de los medios es traducir la experiencia humana a formas externas de información.

Un aspecto crucial de la teoría de McLuhan es su énfasis en la interacción entre los sentidos y la tecnología de los medios. Los medios no se describen como una forma externa del cuerpo, sino, como una extensión del cuerpo. Estos medios se ligan integralmente a los humanos, ya sea en formas tan disímiles como la ropa, los automóviles (Cronenberg hizo una excelente revisión de esta noción en su adaptación de la novela homónima de John Ballard, Crash (2001)), los libros, e incluso la computadora como extensión del sistema nervioso central.

En lo referente a la manera en que experimentamos los medios, McLuhan tipifica dos categorías: calientes y frías. Un medio caliente se "amplía en alta definición", es decir, un estado donde el mensaje del medio está bien definido e implica una baja participación sensorial del receptor. Alternativamente, un medio frío es bajo en la definición y sus datos, implicando una participación sensorial más activa con el medio para terminar su significación. La televisión, para McLuhan, es un buen ejemplo de un medio frío, "en la televisión se prolonga el tacto activo, exploratorio que implica a todos los sentidos simultáneamente, más que el de la
vista por sí solo. Uno tiene que estar "con" eso".(2)

Como la TV proyecta un mosaico de partículas ligeras sobre el espectador, lo obliga a inmiscuirse a una experiencia táctil del medio, de esta forma la participación física en el proceso de la recepción también es aumentada por la necesidad para pedir al mosaico que se presente en forma coherente.

"Videodrome tiene una filosofía y eso es lo que lo hace peligroso"

David Cronenberg, tras realizar
películas tan notables como Shivers (1975) y Rabid (1977), donde conducía sus exploraciones estéticas hacia el sexo y las mutaciones humanas (una constante en toda su filmografía), realiza en 1982 la que quizá pueda considerarse su obra de más profundas lecturas. En Videodrome, el cineasta construye una sociedad altamente mediatizada por las profundas transformaciones que en ella ha producido un medio de tanto impacto como la televisión y específicamente lo ocurrido con un productor televisivo de un canal softcore.

En Videodrome la
imagen-video producida en serie es la forma dominante de los medios, la que se encierra totalmente en la estructura de la sociedad. La pantalla de televisión funciona como el medio primario de la experiencia, y consecuentemente, como la distinción entre la realidad y la representación.

En la filmografía de Cronenberg la sociedad se ve "enfrentada" a operar recíprocamente con la tecnología de los medios, afectando sus patrones de experiencia humana
(en Shivers, a través de un virus sexual; en Rabid, por medio de una mutación estética; en Scanner, debido a la experimentación mental; en La Mosca, a través de la experiementación biotecnológica; en Crash, como metáfora sexual de los automóviles y en Existenz, a través de un videojuego virtual). La constante de Cronenberg es una exploración de cómo los medios tecnológicos están constantemente al servicio de propósitos humanos y de sus transformaciones psíquicas y fisiológicas. En otras palabras, la tecnología al servicio del hombre y productor de sus principales cambios, que los conducen hacia otros estadios. De esta manera, las películas de Cronenberg literalizan la comprensión que McLuhan le dio a los medios: primero, como exploración de posibilidades tecnológicas y segundo, como una profunda crítica a la sociedad que detenta esos medios.

La tecnología y la cultura de la televisión impregnan a la sociedad en Videodrome, y la video-imagen se enreda totalmente con la constitución de la realidad social. En el mundo de Videodrome la representación de la experiencia en la televisión es auténtica; la video-imagen es autónoma. Somos informados que cualquier distinción entre la realidad y la representación está velada en Videodrome cuando el personaje McLuhanesco por antonomasia (Brian O'blivion) nos indica que "la televisión es realidad, y la realidad es menos que la televisión." De esta forma la televisión se constituye como la experiencia dominante en el filme que tiene como protagonista a Max Renn (James Woods), un productor de un canal barato y softcore, que anda en busca de imágenes viscerales para llevar a la gran masa (el público) "porque eso es lo que la gente quiere", según expresa en una entrevista televisiva. Precisamente es Max Renn, quien en su constante búsqueda de imágenes transgresoras, se encuentra con una frecuencia pirata de nombre "Videodrome", un canal que se especializa en mostrar snuff movies (indicio de que Cronenberg hace mucho tiempo se había interesado por este "estilo de películas").

El interés de Max Renn se intensifica al verse expuesto a las imágenes de la señal "Videodrome", y al descubrir un extraño complot a manos de Brian O'blivion, un personaje que se comunica solamente a través de cintas grabadas y por medio de una pantalla de televisor, quien además parece estar dispuesto a colonizar la mente de los tele-espectadores. La exposición a los rayos catódicos de la señal "Videodrome" han comenzado a producir una serie de alteraciones físicas y psicológicas en Max Renn, obligándolo a convertirse en un
asesino de la señal. Renn termina enfrentándose a los responsables, que le ordenan suicidarse.

En Videodrome la televisión es la dimensión dominante de la experiencia social y por cierto, la extensión primaria del hombre tras traducir la información hacia formas externas. Cronenberg literaliza la teoría de McLuhan de "el medio es el mensaje" ya que en Videodrome la sociedad está retratada como una estructura según el patrón formal de la televisión.
El inicio del filme ya nos entrega algunos indicios sobre la importancia de la televisión. Videodrome comienza cuando el título de la película emerge fuera de una pantalla televisiva sin
imágenes (el mosaico apagado, por decirlo de cierta forma). La siguiente escena nos muestra una video- imagen en la pantalla, en la cual un hombre de excesivo peso descansa con una televisión en su estómago. El anuncio está inscrito con el subtítulo "T.V- Cívica, la TV que va a la cama con usted". Esta imagen muestra la completa inmersión de la televisión en las vidas de los humanos. Luego la cámara revela (en las imágenes de la televisión) a la asistente de Max Renn, quien lo invita a despertarse de su letargo. Después que la imagen se oscurece se nos presenta a Max Renn (el protagonista), que sólo en este momento aparece como un elemento diegético o real. Con esta introducción Cronenberg nos mezcla la realidad diegética y extradiegética. La representación, de alguna forma, nos ha saturado la realidad.
Para facilitar el tratamiento audiovisual, Cronenberg centra su filme en Max Renn, un productor exploitation, que siempre anda en busca de
imágenes skockeantes y pornografía softcore, para entregar a las audiencias. Pero hay más, la existencia diegética de Renn en el filme está medida por sus apariciones en la TV. En casi todas las escenas que nos presentan a Renn lo podemos descubrir en una estructura de representación, que dificulta enterarse en qué lado está la realidad y su representación. Esta situación se intensifica cuando el productor es expuesto a las imágenes de sadismo extremo que exhibe Videodrome (que de inmediato las conecta con algo realmente "fuerte" para mostrar a las audiencias) y comienza a confundir su realidad con la representación televisiva.

Una de las alucinaciones de Max Renn (producida por su exposición a Videodrome) lo traslada directamente a una experiencia audiovisual donde él azota sádicamente a su amante Nicki Brand; sin embargo, los azotes los está propinando realmente a una pantalla de televisión. El sentido de la realidad de Max se ha abrumado por la representación televisiva y la señal de Videodrome hace ininteligible esa realidad.

Notas:

(1) McLuhan, Marshall y Fiore, Quentin El medio es el masaje. Un inventario de efectos, Paidós Studio, 1967.
(2) Ibid.

Bibliografía esencial:

Curubeto, Diego Cine Bizarro 100 años de películas de terror, sexo y violencia. Editorial Sudamericana, Argentina, 1996.

Guillot, Eduardo Escalofríos 50 películas de terror de culto. Editorial Midons, España, 1997.

McLuhan, Marshall y Fiore, Quentin El medio es el masaje. Un inventario de efectos, Paidós Studio, 1967.

Norden, Eric Una cándida conversación con el sumo sacerdote del pop cult y metafísico de los medios. Entrevista a Marshall McLuhan en revista Playboy, extracto del libro McLuhan: escritos esenciales, compilado por Eric McLuhan y Frank Zingrone.

VOLVER AL AUTOR

             

Google


web

H enciclopedia